La glutamina suele ser segura en la mayoría de adultos y niños, sobre todo tomada vía oral; aunque los efectos secundarios potenciales de la glutamina aún no se conocen a la perfección. En cualquiera de los casos, podemos decir que los adultos deben evitar cantidades mayores de 40 gramos de glutamina al día, mientras que los niños de 3 a 18 años no deben recibir dosis mayores a 0,65 gramos por kg de peso al día.
Cabe recordar que la glutamina es un aminoácido que se encuentra naturalmente en el cuerpo, misma que es utilizada para contrarrestar algunos de los efectos secundarios de los tratamientos médicos. Por ejemplo, se utiliza para efectos de la quimioterapia del cáncer, incluyendo la diarrea, el dolor y la mucositis, entre otros. Además, la glutamina se utiliza para proteger el sistema inmunológico y digestivo en personas sometidas a radioquimioterapia para el cáncer de esófago.
Cómo funciona la glutamina
La glutamina es el más abundante de los aminoácidos libres del cuerpo, misma que se produce en los músculos y se distribuye por la sangre a los órganos que lo necesitan. La glutamina puede ayudar a la función intestinal, al sistema inmunológico, y otros procesos esenciales en el cuerpo, sobre todo en momentos de estrés. Además, la glutamina es importante para proporcionar combustible a muchas células del cuerpo, aunque también podemos decir que es necesaria para fabricar otras sustancias químicas del cuerpo como otros aminoácidos y glucosa.
En este caso, es importante mencionar que la mayoría de deportistas de élite toman glutamina como suplemento deportivo, especialmente luego de las fuertes jornadas de entrenamiento o competiciones, puesto que ayuda a una rápida recuperación y como un reconstituyente del tejido muscular.
Advertencias y precauciones especiales con la glutamina
Embarazo y lactancia: aún no se sabe lo suficiente sobre el uso de la glutamina durante periodos como el embarazo y la lactancia.
Enfermedad hepática grave con dificultad de pensar o confusión (encefalopatía hepática): en estos casos, la glutamina pudiese empeorar la condición, por lo que no es recomendado su uso.
El glutamato monosódico (MSG) sensibilidad: si eres sensible a MSG, también es posible que seas sensible a la glutamina, especialmente debido a que el cuerpo convierte la glutamina en glutamato.
Manía (trastorno mental): la glutamina puede ocasionar ciertos cambios mentales en personas con manía, por lo que es recomendable evitar su uso en estas situaciones.
Convulsiones: según se ha demostrado, existen ciertas preocupaciones debido a que la glutamina puede aumentar la probabilidad de convulsiones en determinadas personas, por lo que se desaconseja su uso en estas condiciones.
Medicamentos para prevenir los efectos secundarios de la glutamina
Es importante mencionar que los medicamentos que se utilizan en la prevención de las convulsiones, suelen afectar a las sustancias químicas en el cerebro. La glutamina puede afectar también aquellos productos químicos en el cerebro y es posible que reduzca la efectividad de estos medicamentos para prevenir las convulsiones. Además, los medicamentos para contrarrestar los efectos secundarios de la glutamina, que se utilizan para prevenir las convulsiones incluyen fenobarbital, ácido valproico (Depakene), primidona (Mysoline), carbamazepna (Tegretol), gabapentina (Neurontin), fenitoína (Dilantin) y otros.
Interacciones de la glutamina
La lactulosa ayuda a la disminución de amoniaco en el cuerpo, tomando en cuenta que la glutamina se convierte en amoniaco en el cuerpo. En este caso, contando con glutamina junto con lactulosa, esposible que se disminuya la eficacia de la lactulosa. Asimismo, la glutamina puede interaccionar con medicamentos para el cáncer (quimioterapia).
Write a comment: