Se conoce como retención de líquidos a la, que además se origina cuando existe un desequilibrio entre las fuerzas que regulan el paso de los líquidos de un área a otro. Este padecimiento siempre se manifiesta como un hinchazón de los tejidos blandos, debido al acopio de líquidos especialmente en dichas zonas. El agua es el elemento más abundante del organismo por lo que alcanza el 72% del peso corporal de un adulto, también se encuentra distribuido en tres grandes comportamientos:
- Intracelular: la que se sitúa dentro de las células.
- Intravascular: la que se encuentra dentro de los vasos sanguíneos.
- Intersticial: la que se localiza entre ambos, es decir, en los tejidos alrededor de las células.
Si el paso de agua es abundante del espacio intravascular al intersticial, es probable que exista la retención de líquidos. El organismo por medio de un complejo de sistema de hormonas se encuentra frecuentemente ajustado a los niveles de líquidos para que se mantengan de forma constante. Es por ello que si se ingiere más agua de lo normal, no sucede nada ya que es expulsada por los riñones en forma de orina o por medio de las glándulas sudoríparas.
Factores que causan la retención de líquidos
1. Factores orgánicos
Dentro de este factor están las causas inflamatorias en articulaciones por traumatismo o golpes, alergias, trastornos circulatorios por enlentecimiento del retorno sanguíneo y linfático que empuja el líquido hacia el intersticio. Además, están las enfermedades propias de ciertos órganos como el hígado, riñón, corazón, entre otros.
2. Factores cotidianos
Aquí se encuentra el sedentarismo causado por la falta de actividad física, por permanecer muchas horas sentado, etc., el estrés o la angustia y los nervios que desequilibran el sistema hormonal, la ingesta de medicamentos como anticonceptivos orales, corticoides, antiinflamatorios, etc. También están los factores climáticos, en menor medida las fluctuaciones de la presión atmosférica y las altas temperaturas.
Consejos para combatir la retención de líquidos
- Seguir una alimentación rica en vegetales, con abundante agua y líquidos.
- La dieta que se debe seguir deber ser equilibrada y ajustada a la edad y estilo de vida de cada persona.
- Se debe realizar ejercicio de forma regular y constante, también acorde a la edad y el estado físico del individuo.
- Ser muy prudentes con el consumo de sal, con sólo sacar el salero de la mesa y evitar sus agregados de más en los alimentos, se está cumpliendo con una dieta moderada en sodio.
- Hay que tener presente que después de los 50 años estos consejos son más indispensables que a los 20, aunque desde temprana edad es recomendable tomar estos cuidados.
Tratamiento natural para la retención de líquidos
1. Diente de león
El diente de león es una de las plantas que tienen más poder para eliminar agua sobrante del organismo. Además, es bastante útil para desinflamar el organismo en general, para preparar este tratamiento natural hay que realizar una cocción durante 45 minutos de un puñado de hojas y raíces secas en litro y medio de agua. Después se debe beber una taza antes de cada comida.
2. Cerezo
El cerezo ayuda a estimular la eliminación de orina, por lo que esta fruta resulta ideal para las personas que necesiten estimular los riñones para aumentar la micción o enfermedades como: obesidad, edemas (acumulación de líquidos en el cuerpo con hinchazón de los tejidos), inflamación de los riñones, insuficiencia renal, entre otros.
3. Alimentos bajos en sodio
Entre los alimentos bajos en sodio se encuentran las frutas y verduras, aunque hay que mencionar que algunas frutas como la manzana, las persas o las cerezas son especialmente recomendadas. Algunos cereales como el arroz o la avena o patata, la soja u otras legumbres son esenciales para el organismo. También se puede recurrir a la a leche o a sus derivados.
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