Lucir un vientre plano en poco tiempo es posible, especialmente siguiendo una dieta para perder volumen y deshincharse. Una dieta específica que, además de ayudar a deshincharte y a sentirte mejor, puede aportar todos los nutrientes esenciales, necesarios para un correcto funcionamiento del organismo.
La retención de líquidos puede controlarse con una dieta adecuada, así como con algo de ejercicio físico. El vientre hinchado, la hinchazón de manos y la pesadez de las piernas, son síntomas inequívocos de que tu cuerpo está reteniendo líquidos, y eso influye a la hora de pesarte, pudiendo ganar entre dos y tres kilos.
Dieta para perder volumen
En 7 días, además de perder volumen y eliminar toxinas, puedes sentirte mucho mejor, debido a que la retención de líquidos es un problema que puede ir asociado a la ganancia de peso, entre dos y tres kilos. Para una correcta alimentación, es muy importante adoptar hábitos saludables como beber más agua. Precisamente, dejar de ingerir agua es un error, ya que si no tomas suficiente líquido, tu organismo tiende a retenerlo para cumplir con sus funciones.
Asimismo, la sal también contribuye con la retención de líquidos. Lo aconsejable es no superar los 5 gramos de sal al día. El exceso de sal puede provocar dificultades al organismo para expulsarla, lo que contribuye a la retención de líquidos y aumenta tu vulnerabilidad a padecer problemas de hipertensión arterial.
Vientre plano – dieta para 7 días
Toma nota de este ejemplo de dieta ideal y olvídate de la retención de líquidos, obteniendo resultados en tan solo siete días.
Lunes
- Desayuno: infusión diente de león, cereales integrales con frambuesas y yogur desnatado.
- Comida: ensalada con arroz integral, conejo asado con calabacines y granizado de sandía.
- Cena: gazpacho, tortilla de champiñones y ciruelas.
Martes
- Desayuno: infusión de té verde, tostada integral con tomate y queso fresco.
- Comida: garbanzos con cuscús y verduras, brocheta de melón, pera y melocotón.
- Cena: cogollos de lechuga con verduras, boquerones asados y paraguayas.
Miércoles
- Desayuno: infusión de té rojo, medio sándwich integral con pechuga de pavo, zumo de pera y melón.
- Comida: berenjena asada rellena con tomate, dorada al horno y nectarinas.
- Cena: ensalada con pepino, revuelto de champiñones y sandía.
Jueves
- Desayuno: infusión de diente de león, cereales integrales con arándanos y leche desnatada.
- Comida: ensalada de pasta y verduras, muslitos de pollo con puerros y melocotón.
- Cena: crema fría de calabaza, cebolla y patata, lenguado al vapor y plátano.
Viernes
- Desayuno: infusión de té verde, tostada integral con requesón y ciruelas.
- Comida: ensalada verde con tomate, lomo de salmón con arroz integral y melón.
- Cena: crema de verduras (puerro, apio, patata), pavo a la plancha con pimientos y paraguayas.
Sábado
- Desayuno: infusión de dente de león, minibocadillo integral con tomate y queso fresco, pera.
- Comida: ensalada de alubias y verduras, solomillo y yogur desnatado.
- Cena: judías verdes con patatas y tomate, palometa en salsa verde y ciruelas.
Domingo
- Desayuno: infusión de té verde, cereales integrales con frambuesas.
- Comida: ensalada con melón y nueces, fideuá de pescado y sorbete de sandía.
- Cena: verduras a la parrilla, huevo al plato con guisantes y tomate, yogur desnatado.
Picoteo entre horas
A media mañana, para complementar la dieta y picar entre horas, puedes tomar fruta, galletas integrales, yogur desnatado con un puñado de frutos secos, por ejemplo. Para la merienda, cuajada con frutos secos o galletas integrales.
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