¿Cómo evitar el efecto rebote?

El llamado efecto rebote es aquel que ocurre cuando después de una dieta volvemos a recuperar el peso perdido con rapidez. Esto sucede principalmente cuando se comienza a perder peso drásticamente, terminado este periodo, si se le comienza a proporcionar nuevamente nutrientes a tu cuerpo como antes, como estrategia de supervivencia este comenzará a almacenarlos en forma de grasa preparándose para una próxima carencia.

No se deben seguir dietas estrictas     

Por esta razón no se deben seguir dietas estrictas ya que de esta forma solo consigues ralentizar tu metabolismo y colocar tu cuerpo en estado de alerta preparándose para la hambruna. Además, al no obtener los nutrientes a los que está acostumbrado comenzará a quemar masa muscular para obtener energía. Reduce tu dieta ligeramente, unas 500 calorías al día y con el paso del tiempo puede ir eliminando más.

Debes hacer ejercicio

Mientras te ejercites estarás quemando calorías, especialmente con el entrenamiento de pesas ya que estás construyendo músculos los cuales son una especie de motor que siempre requiere energía por lo que queman la grasa. Otro aspecto positivo de este tipo de entrenamiento es que a diferencia del cardio que quema calorías mientras te ejercitas, con las pesas el cuerpo continúa quemando calorías incluso después de concluido el entrenamiento.

Identifica las causas que te llevaron al sobrepeso

Para eliminar un problema de raíz lo mejor es identificar que lo causó en primer lugar, puede haber sido el exceso de alimentos o una alimentación inadecuada que llevó al desequilibrio. Es importante que cuando acaba una dieta se vaya incrementando paulatinamente la cantidad de calorías para adaptar al cuerpo a paso lento a un mayor aporte de nutrientes hasta que el reconozca esta situación como normal.

Aprende a compensar los excesos

Es de vital importancia que controles lo que comes a diario para llevar una dieta equilibrada, pero si tienes algún exceso a lo largo del día tendrás que compensarlo de alguna forma para evitar ganar peso. La solución no está en saltarse comidas sino, por ejemplo, consumir un plato de verduras, frutas, una ensalada de atún y similares horas después de un atracón en una de tus comidas.