Café y té para el hígado graso

El hígado graso es una afección muy común en la población de las sociedades modernas, considerándose durante ya varios años como la enfermedad hepática más habitual. Vivir con ella puede ser algo complejo y doloroso, ya que provoca cansancio, hinchazón, pesadez abdominal, entre otros molestos signos. Por ello, es importante aprender a tratarla para tener una mejor calidad de vida, especialmente a través de una correcta alimentación y algo de ejercicio físico, entre otros aspectos a mejorar.

Debido a que el hígado graso se ha convertido en una de las grandes epidemias de la actualidad, cada vez se realizan más investigaciones al respecto, buscando dar solución a esta realidad. En este sentido, se ha descubierto que entre algunos aliados en estas situaciones pueden ser el café y té para el hígado graso. ¿Cómo es esto posible? Te lo explicamos a continuación.

¿Café y té para el hígado graso?

Pese a que el café ha tenido una mala fama en cuanto a la salud, con su consumo que solía estar asociado a problemas cardíacos, elevar la tensión arterial, siendo muy común que muchos evitasen su consumo. Y, algo similar sucedía con el té, en especial con el té negro.

Sin embargo, en la actualidad esta tendencia ha cambiado gracias a una serie de estudios que demuestran los grandes beneficios del té y el café para tratar esta enfermedad, aunque consumidos siempre con moderación. En este sentido, la Universidad de Duke en Estados Unidos, ha publicado un estudio donde prueban que la cafeína presente en el café y en el té, se enfrentan a las grasas acumuladas en las células del hígado. Lejos de dañar este órgano, lo protegen de la acción de las grasas.

¿Cuánto café y té para el hígado graso consumo?

Sabiendo los buenos efectos del café y té para el hígado graso, una pregunta muy común puede ser ¿cuántas tazas puedo tomar al día? Además, como siempre, lo ideal es consumir de todo pero con moderación. El estudio realizado por la Universidad de Duke, indica que lo ideal es tomar 4 tazas al día. Pero al decir tazas no son vasos, es decir, son tazas pequeñas. Lo más ajustado sería tomar 2 tazas de café y una de té.

El café lo puedes tomar en el desayuno y tras el almuerzo, para que luego a media tarde puedas tomar una taza de té. El té puede ser de la variedad que desees, té rojo, té verde, té blanco… aunque como curiosidad, el té blanco se ha puesto de moda, ya que es el que posee mayores antioxidantes.

Cabe destacar que si eres hipertenso, no es recomendable el consumo del café, de cualquier forma, es recomendable que puedas consultar con tu médico, sobre todo para saber si es adecuado o no consumir café y té para el hígado graso. Asimismo, el consumo adecuado de café, no solo te permite tratar el hígado graso; existen muchos estudios que confirman los efectos del café para tratar la diabetes, lo síntomas de Párkinson y también para mejorar la memoria.

En cuanto al té, es bien sabido que sus beneficios son innumerables, sobre todo por su gran aporte de antioxidantes, capaces de mejorar la circulación, reducir el colesterol malo, entre otros. Es ideal pues, que incluyas estas bebidas en tu dieta, pero también que sigas algunas otras pautas para prevenir y tratar el hígado graso.