Ponerse en forma corriendo, ¿entraña riesgos?

Aunque correr puede ser usado para ponernos en forma es importante entender que la manera en la que se hace puede traer más problemas que beneficios.

Nuevos estudios demuestran que cuando se corre por más de 4 horas a la semana se daña la salud en gran medida, esto fue comprobado por un largo experimento llevado a cabo en Dinamarca y que se publicó en el Colegio Americano de Cardiología.

Tras 12 años analizando a un grupo de corredores y personas sedentarias se detectó que los individuos que practicaban más de 4 horas a la semana igualaban en cuanto a daño a la salud a las personas sedentarias. Según el estudio del hospital Frederiksberg de Copenhague este tipo de ejercicio es demasiado extenuante para el cuerpo ya que físicamente no estamos diseñados para esto lo que provoca daños en las arterias y el corazón.

La recomendación oficial es correr como máximo 3 veces a la semana y a no más de 8 kilómetros por hora.

La explosión del footing

Correr como parte del pensamiento popular para ponernos en forma, surgió como movimiento en los años 60 cuando muchos doctores lo recomendaban para paliar el sedentarismo, pero cifras recientes afirman que cerca del 79% de los corredores se lesionan al menos una vez al año, por lo que sería seguro afirmar que existen mejores formas de lograr un cuerpo fuerte y tonificado.

Los sprint son una buena alternativa ya que no toma mucho tiempo y activa el metabolismo, los entrenamientos de pesas son otra opción que crea el ambiente hormonal correcto para perder grasa, por ejemplo, promoviendo la producción testosterona.

Cada zancada aporta una gran presión a tus articulaciones lo que a la larga resulta muy nocivo para tus rodillas y tobillos, en especial cuando esto se realiza sobre superficies duras como el asfalto. Con esto no quiero eliminar el correr como parte de tu entrenamiento, solo resaltar la importancia de no excederse cuando realizas footing.